Tienen una gran variedad de formas: Los hay macizos cuando se requiere hacer un sello con una mayor resistencia mecánica, esto puede ser porque es mayor el torque que se aplica a la puerta o la tapa o porque éstas son de mayor tamaño y peso, por eso se requiere con mayor resistencia al cierre y a la ruptura. Ejemplos: Soleras ranuradas, Soleras redondeadas, perfiles tipo T, etc. Con bulbos o huecos cuando se requiere hacer un sello menos apretado pero que absorba las posibles diferencias que existan entre las dos tapas metálicas o el cuerpo y la tapa. Ejemplos: Mangueras cuadradas y Cuadrados Huecos, Perfiles Tipo Campana, perfiles tipo "D", etc.
Con figuras especiales, estos perfiles se utilizan para sellar superficies, dispositivos, puertas, equipos, autoclaves, recipientes a presión, etc., que se diseñan especialmente para que se adapten a un contorno específico y hacer un sellado perfecto.
Todos estos perfiles se fabrican en Silicón básicamente por 2 razones: por su resistencia a altas y bajas temperaturas (-40° a 210°C) y por su resistencia a una gran cantidad de elementos y agentes químicos como Amoniaco, Soluciones de Detergente, Glucosa, Pegamentos (no todos), Alcohol, Sulfato de Magnesio, Gas Natural, Neón, Nitrógeno, Ozono, Nitrato de Plata, Vinagre, Aceite Vegetal y en general para Ácidos diluídos.